Con motivo del gran incendio ocurrido los días 27 y 28
de diciembre de 2015 en Berango y Sopela, así como el que a día de hoy afecta a
Matxitxako, entre Bakio y Bermeo, EHBildu de Bizkaia desea trasladar lo
siguiente:
-> En primer lugar, reconocer y agradecer la labor de los
profesionales de los servicios de extinción, su dedicación y profesionalidad,
máxime en estos momentos en los que la regulación de su actividad les puede
dejar en condiciones difíciles.
-> Esta labor, en el caso del primero, tiene más mérito si cabe teniendo en cuenta
que la Ertzantza no cortó los accesos a Unbe hasta la tarde-noche del 27, y no
desde la periferia, como así se lo hicieron ver peticiones vecinales, lo que
permitió que muchas personas, atraídas por la curiosidad, se acercaran a las
zonas afectadas por el incendio, entorpeciendo el paso con sus coches,
saturando las carreteras rurales y estradas y dificultando el acceso a los servicios de
emergencia así como la recepción y coordinación de todas aquellas personas que
voluntariamente se prestaron a colaborar en los trabajos de extinción.
A pesar de la evidente relación de estos incendios con
el clima seco y el viento sur que nos afecta, también es evidente que esas no
son las únicas razones. Creemos también que es necesario analizar los efectos
generados por las políticas forestales y agrícolas, que han priorizado la
especialización, la intensificación y la concentración, llenando nuestros
montes de monocultivo de pino, y en menor término, eucalipto. Estas políticas
han acabado con la biodiversidad en nuestros montes, y los han convertido en
desiertos verdes, que acaban con la humedad y fertilidad natural del suelo
además de reducir las barreras naturales y favorecer la propagación del fuego.
Esto, unido a la expulsión de la ganadería de nuestros montes, ha provocado
también una insuficiente limpieza en nuestros bosques.
Una vez pasen estos episodios, es momento de repensar
las políticas forestales, e impulsar un modelo sostenible, más justo
socialmente y que favorezca un medio ambiente más diverso y rico.
Por otro lado, y en relación a la situación creada en
Berango y Sopela, proponemos también medidas concretas:
->Instalación de dispositivos
anti-incendios en los barrios rurales de las localidades para poder hacer
frente a los incendios en los primeros instantes.
->Elaboración inmediata, en base a
los principios anteriormente citados, de un plan de recuperación y gestión de
las zonas afectadas. Incentivando el uso rural de los terrenos afectados, zonas
nuevas de pastos, y fomentar el desarrollo de la agricultura y la ganadería
local, etc.
->Recuperación la masa forestal
local (prohibiendo, en las zonas
afectadas la plantación de pino y eucalipto).
->No hacer uso de la nueva ley
estatal de posibilitar la construcción en zonas afectadas por incendios.
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