ÚLTIMO PLENO DE LEGISLATURA, TODO IGUAL.

Anteayer, 29 de abril, se celebró el que posiblemente sea el último pleno de esta legislatura. Como no podía de ser de otra manera si hacemos caso a lo visto hasta ahora, lo que debería ser un debate entre diferentes posiciones sobre el orden del día, derivó, una vez más, en intervenciones que poco tenían que ver con la naturaleza de los temas a tratar y sí mucho de demagogia, de descalificaciones y de mítines sin contenido que esperamos terminen con esta legislatura.

El orden del día (pinchar aquí para verlo) no parecía propiciar un pleno crispado. Entre los puntos más destacados se encontraba el Presupuesto Municipal de 2015 que por definición no debería derivar en polémica, como mucho en posiciones encontradas sobre tal partida o tal inversión. Pero no olvidemos que hablamos del Ayuntamiento de Barrika e, incluso, un punto tan sencillo como este puede derivar en un despropósito de intervenciones como finalmente así ocurrió. El orden del día se ha convertido para algunos concejales en una mera excusa para tomar la palabra y hablar de lo que les da la gana. La mayoría de las veces, además, sin sentido alguno pues empiezan a hilvanar diferentes temas que hacen que uno se pierda con facilidad.

En el apartado de presupuestos, nosotros defendimos el proyecto presentado por entender que incorporaba la mayoría de nuestras propuestas realizadas en las comisiones previas. De hecho, durante esta legislatura hemos votado a favor de los presupuestos todos los ejercicios, a excepción del pasado 2014, pues el PNV no quiso incorporar ninguna de nuestras propuestas que presentamos a través de una enmienda parcial (ver aquí). Sin embargo, por razones que desconocemos, este 2015 el PNV ha incorporado las mismas que rechazara hace apenas un año y, por consiguiente, decidimos apoyar el Presupuesto 2015 que en buena parte es resultado de nuestro trabajo.

PROPUESTAS DE EHBILDU RECOGIDAS EN EL PRESUPUESTO APROBADO

-Retirada de la subvención a partidos políticos.

-Proyecto de Haur-eskola.

-Implantar el compostaje público y generar un puesto de trabajo.

-Saneamiento del Barrio de San Telmo (afecta a 85 viviendas).

-Saneamiento de parte de Larretxe.

-Solucionar de una vez filtraciones de agua en Larretxe 1 y 3.

-Salida peatonal de Urtiana

El presupuesto recoge unos 600.000 euros en inversión real, el 45% del presupuesto total, y además de las medidas anteriores se recogen la rehabilitación de la que fuera Alhóndiga municipal de  Cantarranas (por tercer año), actuaciones para la recuperación paisajística de Muriola, la acera entre Goierri y Abadenesolo o el arreglo de las humedades de Atxutegi, entre otras.

A pesar de todo lo anterior, cualquiera que siga nuestro planteamiento en materia presupuestaria (ver aquí la valoración del 2014 por ejemplo)  sabrá que el problema principal del Ayuntamiento en este apartado no es tanto de números y proyectos como de capacidad posterior para la realización del presupuesto mismo. En otras palabras, en el papel queda muy bonito, pero la realidad demuestra que luego no se cumple nada de lo presupuestado, sobre todo en lo que a inversiones ser refiere. Por eso es importante que la actitud y capacidad del próximo equipo de gobierno -que será quién tenga que materializarlo- sea completamente opuesta a la demostrada por el PNV durante esta legislatura. Es decir, si no queremos que, una vez más, el presupuesto quede en papel mojado, el próximo Alcalde no puede actuar como el actual.

Además de nuestra intervención se sucedieron dos más sobre el presupuesto. La primera de ellas fue la retahíla a la que nos tiene acostumbrados el representante de Ibarrika y anterior Alcalde para no decir nada a pesar de pasarse más de media hora hablando. Sus argumentos principales eran que los presupuestos no tienen “corazón” (argumento utilizado otras veces y que nunca explica en qué consiste) y que la sesiones de información y participación (que este año no se han hecho, por primera vez en la legislatura) son una pantomima. Según él, bajo su dirección participarían “hasta los niños”. Por supuesto no dijo cómo lo haría, ni tampoco podemos remitirnos a su periodo como alcalde para hacernos una idea porque durante dicha época ya se encargaba él de ocultar lo máximo posible el presupuesto. Incluso llegó a insinuar que no tenía sentido aprobar unos presupuestos cuando la legislatura tocaba a su fin, olvidándose que él ya aprobó los presupuestos durante su legislatura (con su abultada partida de retribución asegurada). Además, actuar así sería comportarse de manera irresponsable pues dejaría a la recién constituida corporación la tarea de realizar antes de julio un nuevo proyecto presupuestario, dado que hay que presentarlos antes de dicha fecha. En resumen, despropósito tras despropósito.

La siguiente y única intervención más fue la del concejal trásfuga Heri Lago Lekue, que tampoco aportó nada al debate presupuestario y sí al cúmulo de despropósitos iniciado por su predecesor. Parte de su intervención, la dedicó para criticar una propuesta inicial del PNV sobre la subvención a los partidos políticos que a propuesta de EHbildu fue retirada hace tiempo, pero que al parecer el concejal tránsfuga no se había enterado. Es decir, se dedicó a exponer un caso que ya no se contemplaba en el borrador que estaba en discusión. El súmmum del desatino llegó cuando propuso que el Ayuntamiento donase ese dinero directamente a una vecina con graves problemas económicos. Este concejal, a pesar de sus 8 de experiencia, no debe saber que un Ayuntamiento no puede dar dinero directamente a una persona, sino que en todo caso lo debe hacer a través de un subvención a la que puedan acogerse todas las personas en situación similar. Pero tal ejercicio de demagogia también demuestra que no se ha leído bien los presupuestos pues existe en este (y en todos los anteriores de esta legislatura a iniciativa de EHbildu), una partida para afrontar los casos en riesgo de exclusión social. Por tanto si su interés es ayudar a dicha vecina, es por esta vía por la que debería actuar y no por la discursiva y demagógica. A falta de mayor argumentación su intervención sobre presupuestos derivó en una permuta, de unos terrenos, de un concejal del PNV, que al parecer… El Secretario tuvo que cortarle, explicándole que los documentos sobre los que se apoyaba o se los había leído mal o no los había entendido. En cualquier caso, dicho asunto es completamente ajeno a los presupuestos de 2015 y ha tenido otros muchos foros en el Ayuntamiento para exponerlos. Evidentemente, no lo ha hecho.

Sin más aportaciones pero tras cerca de una hora de palabrería se procedió a la votación aprobándose con los votos favorables de PNV y EHbildu (5 en total), la abstención de los dos tránsfugas e Ibarrika y el voto contrario de  los Verdes, que como no intervino no sabemos a qué obedeció.

Fuera del apartado presupuestario, cabe resaltar el hecho de que la propia teniente Alcalde reconoció que por problemas de agenda suya aún no se ha publicado en el BOB el PGOU que tanta prisa tuvo en aprobar el PNV en el mes de febrero. La propia Teniente Alcalde que, efectivamente, suspendió hará casi dos años las comisiones técnicas con el apoyo de su partido el PNV y los dos trásfugas bajo el argumento que durante el periodo presidencialista se ganaría en eficiencia. Como ya hemos advertido más de una vez, durante el tiempo transcurrido desde entonces, la eficiencia ha brillado por su ausencia y este no es más que otro ejemplo de ello. Tampoco el único de anteayer, al que tenemos que sumarle la presentación para su aprobación urgente de la una ordenanza para regular los arenales que no había sido discutida en comisiones anteriores, por la “eficiencia” manifiesta del equipo de gobierno actual. Esta propuesta sólo tuvo el apoyo de Ibarrika que tras otro larga intervención sobre los chiringuitos decidió apoyarla, al parecer sin habérselo leído o al menos comprenderlo, pues dicha ordenanza nada tiene que ver con dichos establecimientos playeros que, como todo el mundo sabe, se instalan lejos del arenal de las playas que era, precisamente, de lo que trataba la ordenanza en cuestión.

Lo más interesante de Ibarrika, e inesperado por otra parte, fue la renuncia a mantener el contencioso administrativo contra el Ayuntamiento por la decisión de otorgar las licencias de Arriaga (ver aquí una explicación de dicho asunto). Parece que finalmente ha rectificado en su oposición a resolver el problema de dichas viviendas que, no olvidemos, surgió bajo su mandato porque no contabilizaron bien el número de viviendas y dieron por colmatado una zona cuando no lo estaba. Se reafirmó en su postura contraria a las licencias pero finalmente desistió continuar adelante con el proceso judicial. Tal vez porque tres escritos, estos sí técnicos, (arquitecto superior municipal, equipo redactor y otro de un bufete independiente especializado en estos temas) avalaban la decisión que tomó (y los argumentos sobre la que se apoyó) en su día el Ayuntamiento. Esas familias podrán al fin, tras la pataleta transitoria de Ibarrika, ejercer su derecho de construcción.

En resumen, un pleno que fue una muestra más de lo que ha venido siendo esta legislatura, donde las intervenciones además de no ajustarse al orden del día se han caracterizado por sus malos modos y sus excesivas escenificaciones que nada aportaban al debate público, incluidas también, por supuesto, las nuestras. El Alclade tampoco supo moderar una sesión plenaria llena de desatinos. Más aún, en más de una ocasión se sumó al al coro de despropósitos respondiendo textualmente a intervenciones de otros concejales  con un “te respondería pero no voy hacerlo”. Para qué va hacerlo, si total sólo es el Alcalde.