BARRIKABASO: EL JUZGADO DESESTIMA EL PLAN DE PAGOS APROBADO POR PNV E IBARRIKA.

Hace un año el Pleno con los votos de PNV (3) e Ibarrika (1) aprobaron –gracias al voto de calidad del Alcalde- un plan de pago que reconocía que el Ayuntamiento de Barrika asumía la mitad de la indemnización a las promotoras del despropósito urbanístico de Barrikabaso. El PNV de Barrika se plegaba así a la exigencia de la Diputación en la que se repartían a medias una indemnización que mientras a la institución foral apenas le repercutía, a nuestro municipio le suponía aproximadamente el 70% de su presupuesto: 948.655 euros de un presupuesto anual aproximado de 1.400.000 euros. El plan de pagos fraccionaba en varios años el pago de la indemnización pero debía ser admitido por el juzgado para su implementación.

Este mes hemos sabido, sin embargo, que el juzgado lo ha rechazado y permite a la parte recurrente, es decir las promotoras, solicitar toda la deuda a cualquiera de las dos partes condenadas: Diputación o Ayuntamiento. Tal como hemos explicado en numerosas ocasiones, una condena “solidaria”, no significa que se deba pagar a medias, como propone la Diputación y aceptan  tanto PNV como Ibarrika. Puede ser, por ejemplo, que el recurrente le exija todo a la Diputación o incluso, aunque menos probable, al Ayuntamiento de Barrika. Visto la predisposición de la Diputación, que ya adelantó la mitad e incluso abonó los intereses a los que no estaba obligado, lo más lógico parece que el recurrente le solicite toda la indemnización a la Diputación.

Gracias a la negativa del juzgado estamos en la situación que defendíamos desde EHbildu Barrika y por la que nos opusimos al Plan de Pagos y, que no es otra, que sea la propia Diputación la que abone la indemnización y el Ayuntamiento negocie su cuota de corresponsabilidad con la entidad foral teniendo en cuenta que:

a. Es la Diputación la responsable final de avalar el proyecto de Barrikabaso. Precisamente, para evitar este tipo de desmanes en los municipios pequeños no se pueden aprobar en modo definitivo proyectos de esta envergadura y, deben tener, en última instancia, el visto bueno de la Diputación. Por tanto, si bien la responsabilidad puede ser compartida entre ambas instituciones (en realidad el PNV), no parece de recibo que ésta sea a partes iguales.

b. El impacto que tiene el pago de la indemnización además a partes iguales sobre el presupuesto de cada institución no es comparable. Mientras que a la entidad foral apenas le supone nada, nuestro municipio estaría abocado a la quiebra en el peor de los casos (un único pago) u obligado a abandonar la política de inversión en favor del pago de la deuda (pago fraccionado).

Claro que para que la negociación tenga un resultado efectivo, PNV (e Ibarrika) deberían abandonar su actitud complaciente con la entidad foral y anteponer los intereses de nuestro municipio sobre los de su partido. Algo que, por lo visto hasta ahora en este y otros temas, no aparece ni tan siquiera como posibilidad.

En definitiva, este es otro ejemplo más de la lamentable herencia que nos dejan 40 años de gestión del PNV en Barrika, en la que además de permitir urbanizar a promotoras de su cuerda en una zona declarada como de especial protección, de otorgar licencias de construcción a familias que aún hoy siguen con las viviendas en un limbo jurídico, debemos, con el dinero de todos los vecinos y vecinas de Barrika (y también del resto de Bizkaitarras) indemnizar a las propias promotoras que venían a Barrika a dar el pelotazo con el visto bueno y el apoyo del PNV de Bizkaia como el de Barrika.

Este lamentable hecho es otro claro ejemplo de cómo algunos privilegiados tienen la capacidad de parapetarse en las instituciones y socializar sus pérdidas cuando sus negocios resultan fallidos. Por supuesto nadie del PNV, ni de Bizkaia ni de Barrika, ha asumido ninguna responsabilidad por el que probablemente sea el mayor despropósito urbanístico de toda Bizkaia.